Ley de Juventud, una cuestión de marca.

Ley de Juventud Valenciana, una cuestión de marca.

Si repasamos la Ley de Juventud de la Generalitat Valenciana que mañana la quieren aprobar en las Cortes Valencianas, se observa que los mayores esfuerzos están puestos en una lavado de imagen con un fuerte contenido de marketing sobre este producto. Si un producto…, que quieren vender como nuevo para estas próximas elecciones a las y los valencianos, realizando un cambiando de nombre e imagen del IVAJ, nombrándole Generalitat Jove, y realizando un empaquetado más protegido y controlado, excluyendo al tejido asociativo. En todo caso aumentan un mayor control sobre el, despojando de derechos por ejemplo al Consell de Joventut de la Comunitat Valenciana, que lo convierten en un ente de base privada, para no asumir su financiación y probablemente para apropiarse de su patrimonio social. Además obvian a los diferentes organismos implicados en las políticas de juventud como los ayuntamientos, que ni siquiera apenas los nombra. Esta ley no reconoce que hoy por hoy,  a los ayuntamientos que a través de sus Concejalías de Juventud son los que mayores esfuerzos ponen para atender las necesidades y problemáticas de los jóvenes, estando siempre mas cercanos a ellos.

Los 21 años de historia del IVAJ se los quieren cargar, para acuñar una nueva marca para su nuevo producto y así aparezcan como los creadores de una nueva institución preocupada por los jóvenes. Institución que realmente han ido desmantelando, rebajando considerablemente las ayudas a becas de estudio en el extranjero, ayudas a las asociaciones y eliminando servicios a la juventud. Muchos de los que mantienen, han privatizado su atención al máximo, sin tener en cuenta a los profesionales y sin reconocer al profesional de juventud que están al frente, que cobran ínfimos sueldos, en la mayoría de los casos no son ni mileuristas. ¿Donde está el prestigioso IVAJ de principios de los años 90 que fue referente en toda España y que su modelo fue el ejemplar para poner en marcha en muchas otras comunidades autónomas?.

Esta maniobra de cambio de marca supone en estos momentos difíciles económicamente hablando, perder la entidad del IVAJ y multiplicar el gasto considerablemente, en lugar de destinarlo a paliar el índice del desempleo juvenil que sobre pasa ya 40 %, teniendo que recordar que las políticas de empleo son competencias de la Generalitat Valenciana. Haciendo caso omiso al dictamen del Consell Jurídico Consultiu de la Comunitat Valenciana, que me limito a reproducir literalmente a continuación,

Especial mención merece también la conversión del Institut Valencià de la Joventut en el nuevo organismo autónomo Generalitat Jove”, advirtiendo que “Fiel heredera del Institut, Generalitat Jove asume todos los medios personales, materiales y los recursos económicos de los que disponía su antecesor…”.

Ese cambio de denominación supone la pérdida de unamarca” que ya era conocida y está consolidada en el ámbito en que se desarrollan sus actividades, que en tal sentido constituye un “patrimonio” de la Generalitat. Pero, además, implica un coste económico derivado de las necesarias adaptaciones materiales que deban llevarse a cabo para implementar la modificación del nombre (rotulación, carteles, publicidad, programas informáticos, membretes, etc.).

Por ello, se sugiere que se reconsidere la alteración propuesta y que se mantenga el nombre ya consolidado delInstituto Valenciano de la Juventud”.

En definitiva esta ley ha perdido la oportunidad de reconocer a los profesionales que trabajan en materia de juventud y que tan innovadores han sido en esta comunidad. No reconocen el trabajo intenso que realizan las concejalías de juventud y desaprovecha las oportunidad de crear unos mínimos competenciales municipales, además de establecer unos canales adecuados de coordinación en materia de juventud a nivel local, provincial y autonómico. Dan la espalda al tejido asociativo sin recoger las propuestas de las asociaciones que han realizado desde el Consell de la Joventut de la Comunitat Valenciana y se apropian del patrimonio público y social del CJCV, cambiando su régimen jurídico.

Es una pena perder una oportunidad, una oportunidad que pierden en definitiva toda la juventud valenciana y que creo que nuestros jóvenes no están para perder tantas oportunidades. Espero que mañana se aparque esta Ley y no prospere, espero que tengamos la oportunidad de mejorarla entre todos y todas, porque nuestros jóvenes se lo merecen.

Juan Medina.      Concejal Juventud de Quart de Poblet


MAS INFORMACIÓN:

Dictamen del Consell Jurídico Consultiu de la Comunitat Valenciana.

Blog de Leo Soria: http://lasonrisadeloscipreses.wordpress.com/

Levante.emv artículo opinión Jesús Martí

Be Sociable, Share!
Share

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Nombre *
Correo electrónico *
Web